Un obús autopropulsado del ejército israelí dispara cerca de la frontera con Gaza, en el sur de Israel.
Por Alfonso Alvarez
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha comprometido a "destruir" el movimiento islamista palestino Hamás. Netanyahu ha anunciado la formación de un "gobierno de emergencia" y un "gabinete de guerra" para afrontar la ofensiva lanzada por Hamás desde la Franja de Gaza.
Este conflicto ha resultado en una respuesta militar intensa por parte de Israel, con bombardeos en Gaza y la movilización de 300,000 reservistas. Se ha informado que más de 1,200 personas murieron en el lado israelí, incluyendo 169 soldados, y más de 1,055 personas han muerto en Gaza, según las autoridades locales. Además, se han producido enfrentamientos entre Israel y el movimiento proiraní Hezbolá en la frontera norte con Líbano.
Benjamin Netanyahu ha declarado que "Hamás es Daesh" y que serán "aplastados y destruidos", comparándolos con el grupo Estado Islámico (Daesh). El gobierno israelí controla 64 de los 120 escaños del Parlamento.
Este conflicto ha llevado a la condena internacional y a la preocupación por una escalada regional. Además, se han producido ataques con cohetes desde el brazo armado de Hamás y la Yihad Islámica en Israel. La comunidad internacional ha instado a ambas partes a cesar las hostilidades y buscar una solución negociada.
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