El Ayuno Intermitente Aumenta el Riesgo de Muerte por Enfermedad Cardiovascular en un 91%

Ayuno intermitente. Foto: EP

Por Alfonso Alvarez, www.laspalomastv.com

19 de marzo del 2024.

Un estudio realizado con más de 20,000 adultos revela que el ayuno intermitente, una práctica que consiste en limitar la alimentación a una ventana de tiempo diaria de 4 a 12 horas, puede tener consecuencias negativas para la salud cardiovascular. Según los hallazgos presentados en las Sesiones Científicas 2024 sobre Estilo de Vida y Cardiometabolismo de la Asociación Americana del Corazón, las personas que siguen este régimen y consumen alimentos en menos de 8 horas al día tienen un 91% más de probabilidades de morir por enfermedad cardiovascular en comparación con aquellas que mantienen un horario de alimentación de 12 a 16 horas al día.

El estudio, liderado por Victor Wenze Zhong de la Universidad Jiao Tong de Shanghai, China, analizó datos de patrones dietéticos de participantes en las Encuestas Nacionales de Examen de Salud y Nutrición (NHANES) de 2003 a 2018, comparándolos con información sobre las personas fallecidas en los Estados Unidos entre 2003 y 2019. Los resultados muestran un riesgo significativamente mayor de muerte por enfermedad cardiovascular entre aquellos que practican el ayuno intermitente, especialmente en personas con enfermedades cardíacas o cáncer.

Aunque el ayuno intermitente ha ganado popularidad como método para perder peso y mejorar la salud del corazón, este estudio resalta la importancia de comprender sus efectos a largo plazo. Si bien la restricción horaria puede ofrecer beneficios a corto plazo, como la pérdida de peso, los riesgos potenciales para la salud cardiovascular deben ser considerados, especialmente en pacientes con enfermedades cardíacas o cáncer.

Los investigadores señalan que, aunque este estudio proporciona una visión importante sobre los efectos del ayuno intermitente, hay limitaciones que deben abordarse en futuras investigaciones. Estas incluyen recopilar más información sobre la calidad nutricional de las dietas de los participantes y comparar datos demográficos y características basales entre los diferentes grupos de restricción alimentaria.

En resumen, si bien el ayuno intermitente puede ofrecer ciertos beneficios, es esencial que los pacientes y profesionales de la salud estén conscientes de sus posibles riesgos, especialmente en relación con la salud cardiovascular. Las recomendaciones dietéticas deben adaptarse a las necesidades individuales de cada persona, teniendo en cuenta su salud específica y condiciones médicas preexistentes.