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Francisco Ortiz Báez desapareció la madrugada del jueves 11 de baril 2024, pero fue encontrado muerto dos días después. 13 de abril del 2024.
El cuerpo del agricultor Francisco Ortiz fue encontrado sin vida luego de su desaparición en circunstancias sospechosas. Ortiz desapareció la madrugada del jueves 11 de abril de 2024, tras supuestamente intentar impedir la extracción ilegal de arena del río Tireo, en el municipio del mismo nombre, ubicado en Constanza.
Ortiz había colocado un tractor en medio de la vía para obstaculizar la actividad de un hombre, identificado por sus hermanos como el principal sospechoso, quien se encontraba junto a otro individuo conocido como "El Cojo", conductor de un camión que estaba cargando arena extraída del río.
Según sus familiares, Francisco Ortiz había intentado detener la extracción de arena como una forma de proteger el medio ambiente de la zona, una causa que había defendido en otras ocasiones.
"Necesitamos justicia, hay más personas involucradas y hay personas que saben quiénes son", declaró Narciso Ortiz, hermano del fallecido agricultor.
El cuerpo de Francisco Ortiz fue hallado en la carretera Blas Olivio del municipio de Bonao y posteriormente trasladado al Instituto de Ciencias Forenses (Inacif) en Santiago.
Hasta el momento, una persona se encuentra detenida en relación con el caso y proporcionó información sobre la ubicación del cuerpo del agricultor, aunque las autoridades no han revelado su identidad.
Familiares y amigos de Ortiz se congregaron frente a la Policía Nacional en busca de respuestas sobre su paradero, solo para ser informados por agentes de la Dirección Central de Investigaciones (Dicrim) de que su ser querido había sido encontrado sin vida.
La muerte de Ortiz ha generado un profundo dolor e indignación entre los residentes de la zona, quienes afirman que el fallecido solo buscaba proteger el suministro de agua que abastece al municipio.
Por esta razón, hacen un llamado al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales para que detenga estas prácticas ilegales, ya que aseguran que están enfrentando una grave crisis de agua tanto para el cultivo como para el consumo humano.