A sus 75 años, Fadul ha dedicado su vida a la medicina y al servicio comunitario. Aunque su rostro es nuevo en la política electoral, su espíritu solidario ha sido una constante. Desde hace algún tiempo, decidió no cobrar por sus servicios médicos, ofreciendo consultas gratuitas y regalando medicamentos y otros suministros a quienes lo necesitan.
Casado desde hace 47 años y padre de cuatro hijos, Fadul encuentra en su familia el apoyo y la motivación para seguir adelante. Heredero de una inclinación política que viene de su familia, se ha convertido en un candidato a la vicepresidencia junto a Roque Espaillat.
Además de su labor médica y política, Fadul aboga por medidas radicales en temas como la justicia y la inmigración. Propone la castración química para violadores sexuales y la pena de muerte para homicidas, argumentando que quienes no respetan la vida no merecen vivir.
En cuanto a la inmigración ilegal, Fadul plantea medidas firmes como la deportación de indocumentados y la negativa a establecer campamentos para refugiados haitianos en el país. También critica la complicidad de algunas autoridades en este problema.
En cuanto a la educación y la salud mental, Fadul reconoce los desafíos que enfrenta el país y aboga por una educación de calidad y un enfoque en el bienestar mental de la población.
A través de su compromiso con la medicina gratuita y sus posturas firmes en temas sociales y políticos, Ernesto Fadul demuestra que la filantropía y el servicio a la comunidad son valores fundamentales en su vida, más allá de su carrera política.