Omar Fernández, de Fuerza del Pueblo, y Guillermo Moreno, del Partido Revolucionario Moderno durante el debate celebrado anoche.El intercambio entre Fernández y Moreno se produjo mientras discutían sobre la inversión del cuatro por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en educación. Moreno mencionó la posición de Leonel Fernández, quien inicialmente se opuso a esta idea, señalando que le agradaba ver a Omar Fernández defender esa postura.
Ante este comentario, Omar Fernández respondió destacando que sabía que Moreno mencionaría a su padre en algún momento, pero le recomendó que si quería debatir a nivel presidencial, participara en el próximo debate presidencial. Fernández también señaló que su padre había planteado que la educación no era solo un problema de inversión, sino también de ejecución.
En sus conclusiones, Omar Fernández expresó su descontento con la táctica de Moreno de mencionar a su padre, calificándola como intento de sembrar discordia entre un padre y un hijo. Fernández enfatizó que no estaría dispuesto a deshonrar o avergonzar a sus padres por un cargo público, y que dejaría la política si alguna vez se viera en esa situación.
El intercambio de ideas también abordó temas como la reforma al Código Laboral y la migración ilegal, donde ambos candidatos expresaron sus puntos de vista divergentes.
En resumen, el debate entre Omar Fernández y Guillermo Moreno reflejó las tensiones políticas y personales en juego, así como las diferencias de opinión sobre importantes temas de política pública. Fernández hizo un llamado claro a Moreno para que evite involucrar a su familia en la contienda política.