Con la participación de grandes nombres como Gilberto Santa Rosa y Tony Vega, el evento fue realmente memorable. Y no puedo dejar de mencionar la presencia del joven timbalero Gerardo Gabriel, que seguramente dejó a todos impresionados con su talento.
Es maravilloso ver cómo se reconoce la trayectoria de Rosario, tanto a nivel nacional como internacional. Desde su inicio como percusionista en diversas orquestas hasta convertirse en una figura emblemática de la salsa, su impacto en la música es innegable.
Y qué mejor manera de honrar su legado que con la concesión de un doctorado honoris causa en Música. Es un merecido reconocimiento a una vida dedicada a la pasión por la música y al enriquecimiento del patrimonio cultural de Puerto Rico y más allá.
¡Felicitaciones a Willie Rosario por su cumpleaños número 100 y por una carrera extraordinaria llena de logros y momentos inolvidables! Que su música continúe inspirando a generaciones futuras y que siga siendo una fuente de alegría y celebración para todos los amantes de la salsa.