
En un juego lleno de emociones, los Cachorros de Chicago vivieron una entrada para el recuerdo el sábado contra los Piratas de Pittsburgh. En la quinta entrada, los Cachorros recibieron seis bases por bolas con las bases llenas, estableciendo un récord que no se veía desde hace 65 años en las Grandes Ligas.
El inning comenzó con el debut en las Grandes Ligas de Paul Skenes de los Piratas, quien permitió dos hits antes de salir del juego. A partir de ahí, los Cachorros enfrentaron a tres lanzadores más de los Piratas, con Kyle Nicolas, Josh Fleming y Colin Holderman, quienes lucharon por encontrar la zona de strike.
Kyle Nicolas, en particular, enfrentó dificultades al realizar 12 lanzamientos consecutivos fuera de la zona de strike, lo que resultó en tres carreras para los Cachorros. La situación empeoró aún más con las bases llenas cuando Josh Fleming y Colin Holderman continuaron otorgando bases por bolas a los bateadores de Chicago.
A pesar de la ventaja momentánea de 8-6 para los Cachorros, los Piratas lograron recuperarse, liderados por un jonrón de tres carreras de Yasmani Grandal en la parte baja de la entrada. Aunque los Cachorros intentaron una remontada en la novena entrada, finalmente los Piratas se llevaron la victoria por 10-9.
Esta increíble actuación de los Cachorros y los Piratas quedará grabada en la historia de las Grandes Ligas como un ejemplo de la imprevisibilidad y la emoción que el béisbol puede ofrecer en cada juego.