Orlando Cepeda conectó 25 jonrones y bateó para .312 en su año de novato.Orlando "Peruchín" Cepeda, el legendario bateador puertorriqueño exaltado al Salón de la Fama del béisbol, falleció a los 86 años. Su carrera en las Grandes Ligas fue marcada por múltiples logros y desafíos personales significativos:
Carrera en las Grandes Ligas: Cepeda debutó en 1958 con los Gigantes de San Francisco y rápidamente se destacó como uno de los mejores bateadores de su época. Ganó el premio de Novato del Año en 1958 y fue MVP de la Liga Nacional en 1967 con los Cardenales de San Luis, siendo el primer jugador unánime en ganar este galardón desde 1936.
Logros y Estadísticas: A lo largo de sus 17 temporadas en las Grandes Ligas, Cepeda acumuló un promedio de bateo de .297 con 379 jonrones y 1,365 carreras impulsadas. Participó en siete Juegos de Estrellas y fue clave en la conquista de la Serie Mundial de 1967 con los Cardenales.
Desafíos y Superación: En 1975, después de retirarse del béisbol, Cepeda fue arrestado por un incidente relacionado con narcotráfico en Puerto Rico. Aunque fue condenado a cinco años de cárcel, cumplió solo 10 meses. Este incidente afectó su reputación y demoró su ingreso al Salón de la Fama, pero eventualmente fue seleccionado en 1999 por el Comité de Veteranos.
Legado y Impacto: Conocido por su apodo "Peruchín" o "Baby Bull", Cepeda fue uno de los primeros jugadores puertorriqueños en destacarse en las Grandes Ligas, abriendo camino para futuras generaciones de jugadores latinos. Además, fue un embajador del béisbol y un símbolo de superación personal, encontrando estabilidad a través de la religión budista y su trabajo humanitario con los Gigantes de San Francisco.
El legado de Orlando Cepeda perdura no solo por sus logros deportivos, sino también por su capacidad de sobreponerse a adversidades personales y convertirse en un modelo a seguir para muchos en el mundo del béisbol y más allá.