Santo Domingo | 29 de agosto de 2024
Amnistía Internacional (AI) ha instado al presidente de República Dominicana, Luis Abinader, a que su segundo mandato, que comenzó el 16 de agosto, se enfoque en el respeto a los derechos humanos y ponga fin a las políticas migratorias que, según la organización, tienen un sesgo racial y afectan principalmente a la población haitiana.
En un comunicado divulgado este miércoles, AI destacó la "necesidad urgente" de que las autoridades dominicanas eliminen el perfilamiento racial, el racismo estructural y la discriminación hacia los migrantes haitianos y los dominicanos de ascendencia haitiana. Ana Piquer, directora para las Américas de Amnistía Internacional, subrayó que el inicio del nuevo período presidencial debe traer consigo un compromiso firme para abordar los desafíos en derechos humanos que la organización ha denunciado y documentado en los últimos meses.
Desde 2022, República Dominicana ha liderado las estadísticas de deportaciones de haitianos, con un número creciente de personas repatriadas a pesar de las advertencias internacionales. Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), en 2023 se deportaron 208,166 personas haitianas, incluyendo más de 20,000 menores. En lo que va de 2024, se han deportado 98,594 haitianos, con más de 5,000 niños y adolescentes incluidos.
Amnistía Internacional ha señalado que muchas de estas expulsiones han sido colectivas, lo que contraviene el principio de no devolución y el derecho de asilo. La organización argumenta que las deportaciones colectivas impiden una evaluación individualizada de las necesidades de protección y los riesgos que enfrentan los deportados al regresar a un Haití en crisis.
El comunicado de AI también critica las políticas migratorias dominicanas que, según la organización, implementan operativos que perfilan y discriminan racialmente. Además, AI ha expresado preocupación por el cierre de vías legales de acceso al país, como la suspensión de visados, que limita la reunificación familiar y el acceso a oportunidades educativas y laborales para los haitianos.
En respuesta a la situación, Amnistía Internacional ha instado a las autoridades dominicanas a revisar sus políticas migratorias para asegurar que se respeten los derechos humanos y la dignidad de todas las personas, independientemente de su origen. La organización también ha compartido testimonios y evidencia de la forma discriminatoria y deshumanizada en que se llevan a cabo los operativos migratorios y las condiciones de los centros de detención.
La presión de AI y otras organizaciones de derechos humanos destaca la creciente preocupación internacional sobre el tratamiento de los migrantes haitianos en República Dominicana y llama a una reevaluación de las políticas actuales para garantizar un trato justo y equitativo.
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