Niños en la escuelaSantiago, RD — 24 de agosto de 2024
A solo tres días del inicio del año escolar, el panorama en el Cibao se torna preocupante debido a problemas persistentes con la infraestructura de los centros educativos. La situación es crítica en varias localidades, amenazando con dejar a cientos de niños sin acceso a la educación en un momento crucial.
En la escuela Marcelino Valenzuela, ubicada en el sector Ensanche Espaillat de Santiago, aproximadamente 400 niños enfrentan el riesgo de no recibir clases debido a la falta de infraestructura adecuada. La escuela carece de espacios de recreación y las aulas son insuficientes para albergar a los estudiantes. La situación es tan grave que los alumnos deben permanecer en aulas hacinadas durante sus largas jornadas escolares, sin espacio para actividades físicas ni recreativas. Esta situación ha llevado a la Asociación de Padres, Madres y Amigos de la Escuela (APMAE) a apoyar la suspensión del inicio de la docencia.
Miguel Jorge, presidente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) en Santiago, ha expresado su preocupación por el impacto negativo en la salud emocional de los niños y la calidad de aprendizaje. Según Jorge, la falta de condiciones adecuadas de infraestructura afecta no solo a los estudiantes, sino también a los docentes, quienes deben esforzarse más para superar estas deficiencias.
La crisis de infraestructura se extiende a otras localidades del Cibao. La escuela Angelita Suárez en El Aguacate de Jacagua está operando temporalmente en una iglesia, mientras que la escuela del Arroyo de Gurabo lleva 10 años esperando su construcción. En el barrio Francisco del Rosario Sánchez, la comunidad del Papayo y la Noriega, también esperan la finalización de nuevas instalaciones educativas.
La situación es igualmente alarmante en San Francisco de Macorís, donde al menos cinco centros educativos no iniciarán clases el lunes 26 de agosto debido a problemas de infraestructura y falta de personal docente. Entre ellos, la escuela Francisco Rodríguez Azcona y el Politécnico Manuel María Castillo enfrentan serias dificultades, con intervenciones en las aulas que aún no se han completado. Además, el Politécnico Pedro Francisco Bonó de la Peña y la escuela Joaquín Cruz también se verán afectados, con la APMAE aprobando la suspensión de las clases por las malas condiciones de los edificios.
En La Vega, la situación no es diferente. Los residentes llevan más de nueve años esperando la finalización de 16 centros educativos, de los cuales solo uno ha sido inaugurado este año. Además, varias escuelas con jornada extendida carecen de comedores, obligando a los estudiantes a comer en aulas y pasillos.
Miguel Jorge criticó duramente al Ministro de Educación, Ángel Hernández, por su gestión, afirmando que es “una gran vergüenza” que el presupuesto de educación haya mostrado un sobrante significativo mientras persisten estos problemas graves. Jorge también expresó su descontento con la decisión del Presidente de la República de mantener al ministro en su cargo, calificándolo como una muestra de incompetencia en la administración del sistema educativo.
A medida que se acerca el inicio del año escolar, la comunidad educativa del Cibao enfrenta una situación de emergencia, con numerosas escuelas aún sin solucionar sus problemas críticos de infraestructura y recursos. La falta de acción adecuada podría afectar seriamente el acceso a la educación para cientos de estudiantes en la región.
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