José David Figueroa Agosto, conocido como el “Pablo Escobar del Caribe”, es una figura que aún resuena en la memoria colectiva de los dominicanos a más de una década de sus casos judiciales. Este camaleónico narcotraficante, que logró evadir la justicia por una década recurriendo a constantes cambios de identidad y apariencia, recientemente reapareció en el programa "Alofoke" de YouTube, donde anunció la publicación de un libro en el que revelará detalles sobre el narcotráfico en la República Dominicana.
Figueroa Agosto fue detenido en 2010 en Puerto Rico, pero fue liberado en 2020 tras cumplir solo diez años de una sentencia de 30, aparentemente debido a su cooperación con las autoridades. Ahora, a cuatro años de su salida de prisión, vuelve a ser noticia con el anuncio de su libro, en el que ha trabajado durante los últimos diez meses.
Inicios y ascenso en el mundo del narcotráfico
Figueroa Agosto comenzó su carrera en el mundo del crimen en los años 90, influenciado por la organización liderada por Israel Ruiz Cáceres, conocido como “El Viejo”. Lo que comenzó como un mecánico y corredor de lanchas rápidas, se transformó en uno de los narcotraficantes más notorios del Caribe, utilizando su habilidad para transportar droga desde Colombia y Venezuela hacia Puerto Rico y la República Dominicana.
Su vínculo con el crimen organizado se fortaleció tras la detención de “El Viejo”, y su nombre empezó a ser conocido en los bajos fondos. En 1995, fue relacionado con la muerte de Arnaldo Martínez, conocido como “Nandy el Gruero”, tras un robo de cargamento a un cartel colombiano, lo que lo llevó a ser sentenciado a 209 años de prisión.
Sin embargo, en 1999, logró escapar de la Penitenciaría Estatal de Río Piedras, mejor conocida como "Oso Blanco", gracias a un elaborado plan de falsificación de documentos de excarcelación. Esta fuga marcó el inicio de una década de vida en la clandestinidad.
Escapando de la justicia y su regreso a República Dominicana
Tras su fuga, Figueroa Agosto se estableció en la República Dominicana bajo dos identidades: en la alta sociedad se hacía pasar por el arquitecto Cristian Almonte Peguero, mientras que en el bajo mundo era conocido como Ramón Sánchez. Su influencia llegó a niveles insospechados, con vínculos en la alta sociedad y las Fuerzas Armadas dominicanas.
Entre 2005 y 2010, amasó una fortuna de aproximadamente 100 millones de dólares gracias al tráfico de más de 18,000 kilos de cocaína. Sin embargo, en 2010, su red comenzó a desmoronarse, y tanto él como su pareja, Sobeida Félix Morel, fueron finalmente detenidos.
El arresto y la promesa de un libro revelador
El arresto de Figueroa Agosto en 2010 fue digno de una película, tras una intensa persecución en San Juan, Puerto Rico. A pesar de los múltiples intentos de mantenerse en el anonimato, las autoridades lograron identificarlo y poner fin a su carrera delictiva.
Desde su liberación en 2020, poco se sabía de su paradero hasta su reciente aparición en "Alofoke", donde anunció su próximo libro. Según sus propias palabras, “Estoy trabajando en un libro del que vendí el derecho completo, en eso están trabajando mis abogados, ya vendí el derecho”.
Este libro, que promete revelar detalles inéditos sobre el narcotráfico en la República Dominicana, genera grandes expectativas y podría arrojar luz sobre uno de los capítulos más oscuros de la historia criminal del Caribe.
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