Banderas de España y VenezuelaLa relación diplomática entre España y Venezuela se encuentra en una situación tensa este miércoles, tras los cuestionamientos de Madrid sobre la reelección del presidente Nicolás Maduro y el asilo otorgado a su rival político. Los intercambios de declaraciones se originaron en los Parlamentos de ambos países, intensificando el conflicto entre las dos naciones.
Cuestionamientos desde España
En España, el Congreso de los Diputados aprobó una propuesta solicitada por la oposición de derecha, que insta al gobierno de Pedro Sánchez a reconocer la victoria del opositor Edmundo González Urrutia en las elecciones del 28 de julio. Maduro, quien ha estado en el poder desde 2013, fue proclamado reelecto para un tercer mandato de seis años por el Consejo Nacional Electoral (CNE). La oposición venezolana, sin embargo, asegura que González ganó la elección y acusa al gobierno de fraude.
Reacción desde Venezuela
En respuesta, el jefe del Parlamento venezolano, Jorge Rodríguez, ha propuesto romper las relaciones diplomáticas, consulares y comerciales con España. En una sesión del plenario, Rodríguez exigió que se expulsen a todos los representantes y cónsules españoles y que se detengan los vuelos y actividades comerciales entre ambos países. También solicitó a la Comisión de Política Exterior del Legislativo que apruebe una resolución para formalizar la ruptura diplomática.
Impacto en la diáspora
En Venezuela, residen aproximadamente 136,145 españoles, mientras que en España viven unos 280,000 venezolanos, incluidos varios dirigentes opositores. La tensión actual podría afectar a ambas comunidades y complicar la relación entre los dos países.
Posición del Gobierno español
La resolución del Congreso español, aprobada con 177 votos a favor y 164 en contra, es simbólica y no obliga al Ejecutivo de Sánchez a acatarla. La propuesta pide al gobierno español que lidere el reconocimiento de Edmundo González en las instituciones europeas e internacionales. Sánchez ha solicitado la publicación de las actas electorales, pero no ha reconocido oficialmente a González Urrutia.
En una visita a China, el presidente Sánchez defendió su decisión de otorgar asilo a González como un "gesto de humanidad", en respuesta a la persecución y represión que enfrenta el opositor en Venezuela.
Situación en Venezuela
González Urrutia llegó a Madrid el pasado domingo tras pasar un mes en la clandestinidad, enfrentando cargos en Venezuela por su presunta implicación en la difusión de actas electorales. Maduro también ha solicitado prisión para González y para la líder opositora María Corina Machado, acusándolos de violencia durante las protestas poselectorales, que resultaron en 27 muertos y más de 2,400 detenidos.
Cientos de personas marcharon en Caracas pidiendo al presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva que intervenga para la liberación de los "presos políticos" en Venezuela. Lula, junto con el presidente colombiano Gustavo Petro, lidera los esfuerzos para encontrar una solución pacífica a la crisis, mientras varios países y Estados Unidos no reconocen la victoria de Maduro.
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