Investigación y medidas inmediatas
Una comisión compuesta por técnicos forestales y miembros del Servicio Nacional de Protección Medioambiental (SENPA) se desplazó al lugar para investigar los hechos y determinar responsabilidades. Según Samuel Ledesma, técnico de la dirección provincial Peravia, el daño afecta seis tareas de bosque, incluyendo especies como cabrita, guayacán, saona y almácigo.
"Este es un crimen ecológico dentro de un área protegida. Procederemos a identificar a los responsables para someterlos a la justicia, ya que esto amerita condenas severas, más allá de sanciones económicas", afirmó Ledesma.
Vigilancia reforzada
Para prevenir más daños, el administrador del Parque Natural Dunas de Las Calderas, Joaquín Peláez, anunció vigilancia permanente en la zona. También se retomará el proyecto de infraestructura de control, que incluye la instalación de torres de vigilancia con una inversión de RD$18.9 millones.
Reacciones locales e indignación
Líderes comunitarios y organizaciones civiles han expresado su consternación. Iván Peña, presidente de la Fundación Máximo Gómez, calificó el acto como "criminal e ilegal contra este patrimonio eco-cultural". Por su parte, Gregorio Aybar, de la Asociación Dominicana de Profesores, filial Baní, instó a los ciudadanos a exigir mayor control.
La Alianza Banileja promueve una campaña para que Las Dunas sean elevadas a la categoría de Parque Nacional, fortaleciendo su protección bajo las leyes 64-00 y 202-04, que las designan como Reserva Científica.
Un llamado a la acción
La comunidad de Baní, reconocida por su compromiso con la conservación, exhorta a las autoridades a implementar medidas más estrictas para garantizar la protección de este invaluable ecosistema, esencial para el equilibrio ambiental y cultural de la región.
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