Finer destacó que Estados Unidos colaborará con las partes interesadas haitianas y los socios internacionales para abordar la inestabilidad en Haití como parte de sus esfuerzos para respaldar al pueblo haitiano. Este trabajo conjunto se concibe como una labor a largo plazo, con el objetivo principal de promover la gobernabilidad democrática, la seguridad ciudadana y el progreso económico en el país caribeño.
Los líderes sociales presentes en la reunión enfatizaron la necesidad urgente de generar una mayor conciencia pública sobre los profundos desafíos de seguridad que enfrenta la población haitiana. Asimismo, subrayaron la importancia de fortalecer los esfuerzos impulsados por Haití para restaurar la estabilidad política y abordar las profundas necesidades humanitarias en el país.
Desde la Casa Blanca, se afirmó que Estados Unidos sigue comprometido a apoyar al pueblo haitiano y se reconoció el papel positivo que la sociedad civil estadounidense y las comunidades de la diáspora pueden desempeñar para garantizar una resolución exitosa y sostenible de la crisis en Haití.