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Rafael Leonidas TrujilloPor Alfonso Alvarez, www.laspalomastv.com
30 de mayo del 2024
Hace 63 años, el dictador Rafael Leonidas Trujillo subió a su Chevrolet Bel Air, acompañado por su chofer Zacarías de la Cruz, y se dirigió hacia San Cristóbal, sin imaginar que se aproximaba su final.La muerte del tirano fue meticulosamente planeada durante meses por un grupo de hombres que, a pesar de su cercanía con él, estaban hartos de los crímenes y abusos de poder que Trujillo había infligido al país durante más de tres décadas. Este grupo estuvo compuesto por Antonio de la Maza, Juan Tomás Díaz, Antonio Imbert Barrera, Modesto Díaz, Pedro Livio Cedeño, Salvador Estrella Sadhalá, Roberto Pastoriza, Huáscar Tejeda y el teniente Amado García Guerrero.
Divididos en tres autos, los conspiradores emboscaron al “Benefactor de la Patria” con el plan inicial de secuestrarlo y hacerlo preso para luego comunicarlo al ministro de las Fuerzas Armadas, quien estaría a cargo de dar un golpe de Estado. Sin embargo, el plan no salió como se esperaba.
Una parte de los conjurados siguió al déspota en un Chevrolet negro, mientras los demás esperaban la señal para adelantar y bloquear a Trujillo. Aunque la señal no se dio, al observar que el auto ya seguía al dictador, los demás decidieron actuar, rebasando el vehículo en el que se trasladaba Trujillo.
Aproximadamente a las 10:00 de la noche del 30 de mayo de 1961, se produjo el enfrentamiento. Antonio de la Maza disparó primero, hiriendo al sátrapa en un hombro. Un tramo de la George Washington se convirtió en el escenario de este hecho histórico que cambiaría para siempre la historia de la República Dominicana.
Los complotados dispararon alrededor de 60 balas, de las cuales siete impactaron a Trujillo. Durante el tiroteo, Trujillo logró herir en el vientre a Pedro Livio Cedeño. A las 10:10 de la noche, Trujillo yacía muerto en el suelo.
Hechos de impacto
Durante la dictadura de “El Jefe”, el país sufrió recurrentes crímenes y violaciones de derechos humanos. Entre los más recordados se encuentra el asesinato de las hermanas Mirabal (Patria, Minerva y María Teresa) junto a Rufino de la Cruz. También destaca la “Matanza del Perejil”, donde entre 15,000 y 20,000 haitianos fueron asesinados bajo el pretexto de solucionar problemas de migración ilegal.
La eliminación de Trujillo no solo puso fin a una dictadura sangrienta, sino que también marcó el inicio de un largo camino hacia la recuperación de la democracia y la justicia en la República Dominicana.