La campaña del actual presidente no pierde de vista unas encuestas poco favorables que, por ahora, le dan ventaja a su eventual oponente en unas elecciones que se presentan muy reñidas.La retórica antiinmigrante ha vuelto a cobrar protagonismo en la política estadounidense, especialmente de cara a las próximas elecciones presidenciales. Tanto el actual presidente, Joe Biden, como su eventual oponente, Donald Trump, parecen estar haciendo uso de estrategias similares para ganar votos en una contienda que se anticipa reñida.
Desde la campaña de Trump en 2016, la política antiinmigrante ha sido una parte central de su plataforma. Prometió construir un muro en la frontera sur con México y tomó medidas para restringir el acceso al asilo y aumentar las deportaciones. A pesar de sus esfuerzos, las cifras indican que la mayoría de los crímenes en Estados Unidos son cometidos por ciudadanos estadounidenses, no por inmigrantes.
En respuesta a las preocupaciones de los votantes sobre la inmigración, Biden ha adoptado una postura más dura en este tema, emitiendo órdenes ejecutivas para frenar la llegada de inmigrantes irregulares y restringir el acceso al asilo. Aunque él y su equipo argumentan que estas medidas son más moderadas que las de Trump y solo se aplicarán en circunstancias específicas, algunos críticos dentro de su propio partido consideran que estas acciones son contrarias a los principios de una política migratoria humanitaria y necesaria.
El debate sobre la inmigración se ha intensificado en un contexto electoral en el que ambos partidos buscan ganar apoyo. Sin embargo, expertos en migración como el sociólogo Hein de Haas argumentan que es importante desmontar las falsedades propagadas por los políticos y reconocer la contribución positiva de los inmigrantes a la sociedad. Como cita de Haas al autor suizo Max Frisch, "Queríamos trabajadores, pero en su lugar obtuvimos personas", subrayando la importancia de tratar a los inmigrantes con dignidad y respeto.
En este año electoral, donde las líneas entre demócratas y republicanos parecen desdibujarse en ciertos temas, es crucial mantener un debate informado y centrado en soluciones que respeten los derechos humanos y promuevan la integración de los inmigrantes en la sociedad.