República Dominicana sigue de cerca la evolución de la viruela símica, también conocida como Mpox, después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la declarara una emergencia de salud pública de alcance internacional el miércoles.
Antecedentes y Situación Actual
La viruela símica es una enfermedad infecciosa causada por el virus Mpox, que se manifiesta con erupciones dolorosas, inflamación de los ganglios linfáticos y fiebre. El primer caso en el país se identificó en julio de 2022, en un paciente de 25 años que había regresado de Estados Unidos. Para septiembre de 2022, se habían reportado 47 casos confirmados.
Hasta abril de 2024, se confirmaron al menos seis casos de viruela símica en el país, con 19 casos sospechosos descartados. Las cifras actuales de incidencia no están disponibles, pero se continúa monitoreando la situación de cerca.
Desarrollo Global y Variantes
La OMS ha elevado la alerta para Mpox a nivel internacional debido a la aparición de varias variantes del virus y diferencias en los niveles de riesgo y contagio. Esta decisión refleja una creciente preocupación por la expansión del virus más allá de los focos iniciales, con brotes recientes en África y otros países.
En 2023, República Dominicana introdujo un número limitado de vacunas contra Mpox, dirigidas a grupos de riesgo. Entre 2022 y 2023, se observó un brote significativo globalmente, con la variante clado Ib predominante.
Nueva Cepa y Alertas Internacionales
En abril de 2024, se identificó una nueva cepa potencialmente pandémica en África. La OMS ha advertido sobre el riesgo de brotes en Europa, mencionando que la nueva variante, clado 1, es más contagiosa y peligrosa. Esta cepa ha sido reportada en Suecia y otros países europeos.
En la República Democrática del Congo, la situación es particularmente grave, con al menos 548 muertes y 38,465 casos registrados desde enero de 2022. El aumento de casos en 2024 ha sido del 160% en comparación con el año anterior.
Recomendaciones y Medidas
El virólogo dominicano Robert Paulino ha recomendado fortalecer las redes de vigilancia y aumentar las medidas preventivas en el país. La vigilancia continua y la preparación ante posibles brotes son cruciales para controlar la propagación de la viruela símica.
Conclusión
La viruela símica sigue siendo una amenaza significativa para la salud pública global. República Dominicana se mantiene alerta y toma medidas para controlar la enfermedad, a medida que la OMS intensifica su vigilancia y coordinación internacional frente a la expansión del virus.
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