US Vice President and Democratic presidential candidate Kamala Harris smiles during a presidential debate with former US President and Republican presidential candidate Donald Trump at the National Constitution Center in Philadelphia, Pennsylvania, on September 10, 2024. (Photo by SAUL LOEB / AFP)La vicepresidenta de Estados Unidos y candidata demócrata a la presidencia, Kamala Harris, llegó este viernes a la frontera con México, en Arizona, para tratar el tema de la migración. Este es el primer viaje de Harris a la frontera durante su campaña electoral, la cual comenzó en julio tras reemplazar al presidente Joe Biden como candidata del Partido Demócrata.
En medio de una reñida competencia con el ex presidente Donald Trump, quien se postula nuevamente por el Partido Republicano, Harris busca hacer frente a las críticas en torno a la gestión migratoria del actual gobierno. Arizona, un estado clave para las elecciones del 5 de noviembre, se ha convertido en un punto estratégico de la campaña de Harris para abordar uno de los temas que su rival utiliza como línea de ataque.
Un enfoque humanitario y de seguridad
Durante su discurso en la ciudad fronteriza de Douglas, Harris planea equilibrar su promesa de implementar medidas de seguridad más estrictas en la frontera sur, junto con el desarrollo de un sistema humanitario de migración. Según su equipo de campaña, se espera que Harris acuse a Trump de obstaculizar el avance de un proyecto de ley sobre el tema, con el propósito de evitar un eventual impacto positivo que favorezca a Harris en la contienda presidencial.
"El pueblo estadounidense merece un presidente que se preocupe más por la seguridad fronteriza que por jugar a juegos políticos," dirá Harris, según adelantaron fuentes de su equipo.
Por su parte, Donald Trump ha centrado gran parte de su campaña en una postura anti-inmigración, prometiendo deportaciones masivas y promoviendo una retórica negativa sobre los inmigrantes en el país. El ex presidente incluso ha hecho afirmaciones sin evidencia, acusando a los inmigrantes de actos extremos y generando controversia con sus comentarios.
Datos sobre seguridad fronteriza
Este viernes, el diputado republicano Tony Gonzales divulgó cifras del Departamento de Seguridad Nacional que indican que en el país hay 425.000 extranjeros sin ciudadanía estadounidense y con antecedentes penales, incluidos 13.000 condenados por homicidio. Trump aprovechó el informe para atacar a su rival, afirmando que estas personas cruzaron ilegalmente la frontera durante los últimos tres años bajo la administración de Biden y Harris.
Sin embargo, los expertos señalan que las estadísticas no especifican cuándo estas personas llegaron a Estados Unidos. Aaron Reichlin-Melnick, del Consejo Estadounidense de Inmigración, explicó a la AFP que es posible que muchos de estos individuos hayan estado en el país durante décadas. Además, destacó que la razón principal por la cual algunos migrantes no pueden ser deportados es por problemas diplomáticos con sus países de origen, y no por las políticas de la actual administración.
Disminución en los cruces ilegales
Harris ha logrado disminuir la ventaja de Trump en materia migratoria, aunque este tema sigue siendo un punto débil para la vicepresidenta debido al aumento del número de cruces ilegales durante la administración demócrata. Sin embargo, Harris defiende que estas cifras han disminuido desde junio, cuando Biden firmó un decreto para restringir el sistema de asilo en la frontera sur.
De acuerdo con cifras oficiales, el número de encuentros en la frontera sur pasó de 250.000 en diciembre del año pasado, a 58.000 en agosto. Durante su visita a la frontera, Harris destacará su trayectoria como fiscal en California, estado fronterizo, y su experiencia en casos relacionados con el tráfico de drogas y la presencia de pandillas.
Retórica anti-inmigración y votantes latinos
Los republicanos han mantenido una línea de ataque constante contra Harris en materia migratoria, acusándola de cambiar de opinión sobre la ampliación del muro fronterizo entre México y Estados Unidos, que se extiende a lo largo de 3.050 kilómetros. Además, la critican por su papel en la administración de Biden, cuando el presidente le encargó investigar las causas de la migración ilegal desde América Central, haciendo que algunos la llamaran falsamente "zar de la frontera".
El tema de la migración ha sido complejo para Harris, quien enfrentó críticas en 2021 por no haber visitado la frontera. En una entrevista de ese año, cuando un periodista la cuestionó sobre su ausencia en la zona fronteriza, ella respondió: "Y tampoco he ido a Europa," comentario que fue duramente criticado.
En este escenario, Trump ha incrementado su retórica nacionalista y anti-inmigración, lo cual le ha permitido ganar apoyo, incluso entre parte de la comunidad latina, que además lo percibe como una mejor opción en términos de política económica.
Durante un evento político el jueves, Trump reiteró su postura contra los inmigrantes: "Ellos infectan nuestro país," afirmó, intensificando su retórica divisiva mientras busca reconquistar la Casa Blanca.
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